jueves, 27 de marzo de 2008

Pequeña palabra...


Aquella pequeña palabra balbuceada
asoma con dificultad para los poetas
llena con facilidad
los corazones, escuchada en cámara lenta
en ojos lagrimeantes
pequeña si, para llenar
paginas enteras contra esta ciencia que nos mata

miércoles, 26 de marzo de 2008

Cercanos al corazón...


Cercanos al corazón es una serie de retratos que añadiremos poco a poco... en el rostro descubrimos el ser!



jueves, 13 de marzo de 2008

Cada día...


Cada día va siendo un poco a la vez, de dulzuras, temores, alegrías y este clamor por vivir sin saber. Pienso o cuando menos eso creo, camino y de ello si estoy seguro, pero continuar es sólo posible si logro mirar la misericordia, si logro dejar en puerto este lastre, votar el barco a la mar, levar el ancla del temor, navegar los minutos cámara en mano, para luego compartir una o mil imágenes…

jueves, 6 de marzo de 2008

miércoles, 5 de marzo de 2008

Escatológico... tiempo que ahora no entiendo





Escrito la tarde
de aquel día.

Llanto
sueño de un día
alba
te levantas
y no esta…
ojalá.

Escrito la mañana
Siguiente de aquel
Día.

Cepillo, pasta dental.
información…
ayer desapareció,
flores,
verdes,
Que bien.


Stefanie.La piel, de ella humane, de natura...



Texto de Simón Arias.

Poema 1
Amor distante,
Ayunas sensaciones,
Ungidas ansias
Desbaratadas
En una piel agrietada
Cultivadas caricias
Absorben la carne
Aniquilado los dedos
Funestas manos
Que se han marchado

martes, 4 de marzo de 2008

El Caribe inspira con toda su belleza


texto tomado del libro entre cuentos y cartas de José flores y publicado en el año 2000.

Mírame
Si fijas tus ojos en mí sabrás cuanto soy capaz de hacer por ti, se que tienes una profundidad especial en ellos y que el color supera cualquier pantone conocido, los sentimientos destellantes de pasión por lo que haces te distingue de todos los demás, no puedo dirigir mis fuerzas hacia otro ser cuando me miras, tú, allí sentada tan dispuesta a convencerme de servirte en el mejor de los sentidos, preciosa, tu mirada calma mi desesperación por actuar, me concentro en tus deseos, cuando duermo y mis ventanas se cierran creo que no te volveré a ver, temo un desencuentro a la mañana siguiente cuando quien me conecte no seas tu sino tu asistente, ese odioso tecnócrata que no sabe de tu amor escondido por los micro computadores.