viernes, 16 de enero de 2009

UNA CAJITA...


Quiero salir al mundo, con una cajita colgando de mi hombro, en ella voy atraparlo todo, o casi todo, para luego cuando nos encontremos poder mostrártelo, pero sabes no todo aquello atrapado en la cajita puede ser mostrado, no, algunas imágenes deben permanecer en la intimidad, en lo secreto del corazón, de modo que ningún intruso penetre en ese pequeño mundo que hemos construido, tu pequeña, yo con caminos andados, recorridos, desviados. Donde habitas, ese lugarcito alcanzado hace unos años, ese brillo obsequiado a la mirada curiosa, allí, es donde creo que debe estar guardado todo lo que no deseemos perder.
Quiero salir de este claustro y mirar otras sonrisas, para así poder alimentar las que ya me fueron regaladas, anda acompáñame un rato, no intentes atraparme, camina un poco a mi lado, pues ya pronto se bifurcaran nuestros pasos y tu y yo seremos una experiencia de pronto hermosa, un recuerdo eventualmente agradable, un espacio en los corazones, pero cada uno con una vida en toda su magnitud.
No te confundas, eres tú y nadie más de este modo, ni lo pienses, apenas vive, y luego sabrás dentro de mucho que este hoy fue un descanso en medio de la vorágine ronroneante en la cual vivimos. Pssht, no digas nada, se que no hablas mucho, pero puedo leer en ti mucho mas de lo despreciado por otros, pero que en realidad son tu valor, tu fuerte. Todo esto es entre tú y yo…